Yo soy tu amigo fiel
Yo soy tu amigo fiel
Tienes problemas.... Yo también...
no hay nada q no pueda hacer por ti
Y estando juntos todo marcha bien
Pues yo soy tu amigo fiel.
Hermoso pensamiento nos ofrece la filosofía Disney que, al calor de unos vodkitas y tras un par de fumadas a la pipa develó mi reprimida molestia hacia las relaciones humanas, específicamente a las amistades.
Me queda claro que las amistades (las verdaderas, por lo menos) son libres, igualitarias, nobles y desprendidas pero ayer me reconfirmé un termino fundamental para establecer un vinculo estrecho con alguien: la fidelidad. Concepto que se refiere a no traicionar la confianza.
Las amistades se forjan a través del tiempo, por medio de las experiencias vividas, la afinidad y convivencia, en algunas ocasiones la discontinuidad de esta cohabitación puede generar situaciones de crisis, y la forma de reaccionar ante esto puede ser infinita e impredecible o errada. Creo que cuando se trata de las emociones simplemente la racionalidad queda ausente y en su ausencia podemos herir o fragmentar a las personas.
Definitivamente siempre será una gran pena vivir el distanciamiento de una amistad, sobre todo si la ruptura es fría y muda . Puedo entender porque pasan estas cosas, a veces las personas no logran ser fieles a una amistad, se aleja y a veces termina su ciclo en nuestras vidas, eso lo entiendo, pero me declaro incapaz de olvidar y creo que lo triste del asunto es darse cuenta que los vínculos son frágiles y que una vez rotos ya no es fácil remendarlos.
Una vez mas me dejo cobijar por la sabiduría que me ofrece Disney y comprendo que así como unas amistades acaban otras te esperan con la mano tendida!